Gobierno confirma nuevos haberes jubilatorios: El gobierno argentino ha anunciado un importante incremento en los haberes jubilatorios y asignaciones sociales, a través de una resolución publicada en el Boletín Oficial. Este ajuste, que entrará en vigor a partir de diciembre de 2025, implica un aumento del 2,34% sobre los montos actuales, en línea con la inflación reportada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) durante octubre de 2025. Esta medida beneficiará tanto a jubilados como a titulares de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y asignaciones familiares, reflejando un esfuerzo por mejorar el poder adquisitivo de los sectores más vulnerables de la sociedad.
Incremento en los haberes jubilatorios
Uno de los puntos más destacados de la resolución es el ajuste en los haberes jubilatorios. Según la resolución 361/2025 de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), a partir de diciembre de 2025, los jubilados verán un aumento en sus haberes mínimos y máximos. El haber mínimo pasará a ser de $340.879,59, mientras que el máximo ascenderá a $2.293.796,92. Este ajuste busca garantizar que los jubilados, especialmente aquellos con pensiones más bajas, puedan enfrentar el aumento del costo de vida.
Este incremento no solo beneficia a los jubilados, sino también a otros sectores de la población que reciben beneficios relacionados con el sistema de seguridad social, como aquellos que dependen de las asignaciones familiares. De esta forma, el ajuste tiene un impacto directo sobre una amplia gama de beneficiarios, ayudando a aliviar las dificultades económicas que enfrentan muchas familias argentinas.
Aumento en las asignaciones familiares
La resolución también establece un ajuste del 2,34% para las asignaciones familiares, lo que incluye a los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y otras prestaciones para familias. A partir de diciembre de 2025, el monto de la AUH se incrementará a $122.492, mientras que aquellos residentes en los distritos de la Zona 1, que comprenden algunas de las áreas con mayores índices de vulnerabilidad, recibirán una cifra de $159.240. Este aumento es particularmente relevante para las familias que dependen de este ingreso para cubrir los gastos básicos de sus hijos.
Además de la AUH, el incremento también se aplica a otros beneficios sociales como la asignación por embarazo para protección social, que tendrá los mismos montos que la AUH. En cuanto a las asignaciones para protección social destinadas a niños con discapacidad, se establecerán montos de $398.853 para la mayoría de los beneficiarios, mientras que aquellos residentes en la Zona 1 recibirán $518.509. Estos ajustes son fundamentales para mejorar la calidad de vida de las familias en situaciones de vulnerabilidad.
Nuevos montos para asignaciones familiares según ingresos
La resolución 361/2025 también establece nuevos montos para las asignaciones familiares que varían según el ingreso familiar. A partir de diciembre de 2025, los trabajadores en relación de dependencia, los monotributistas, jubilados y pensionados, entre otros, podrán acceder a los siguientes montos por hijo, según su nivel de ingresos:
- Para aquellos con un Ingreso General Familiar (IGF) de hasta $948.361, la asignación familiar será de $61.252 por hijo.
- Para ingresos entre $948.361,01 y $1.390.864, el monto de la asignación será de $41.316.
- Para ingresos entre $1.390.864,01 y $1.605.800, se otorgará una asignación de $24.990.
- Aquellos con ingresos entre $1.605.800,01 y $5.022.048 recibirán una asignación de $12.892.
Estas asignaciones están diseñadas para ajustar el apoyo económico según las necesidades de cada familia, garantizando que aquellos con menores ingresos reciban un mayor monto de apoyo. Este sistema escalonado busca generar una distribución más equitativa de los recursos, brindando un alivio a las familias con menos capacidad económica.
Otros aumentos en las asignaciones sociales
El gobierno también ha establecido incrementos en otras asignaciones sociales, como la Asignación Familiar Prenatal, la Asignación por Nacimiento, la Asignación por Adopción y la Asignación por Matrimonio. A partir de diciembre de 2025, estos beneficios recibirán los siguientes montos:
- La Asignación por Nacimiento aumentará a $71.396.
- La Asignación por Adopción ascenderá a $426.877.
- La Asignación por Matrimonio será de $106.904.
Estos aumentos también seguirán el esquema de los ingresos familiares, por lo que las familias con menores recursos serán las que más se beneficien de este tipo de prestaciones. De esta manera, el sistema de asignaciones sociales busca responder a las necesidades más urgentes de las familias argentinas, asegurando que todos los sectores de la población tengan acceso a la asistencia que requieren.
Impacto de los aumentos en la economía familiar
El aumento de las asignaciones y los haberes jubilatorios representa un alivio para muchas familias argentinas que enfrentan los efectos de la inflación y el aumento del costo de vida. Estos ajustes son un paso importante para mitigar la pérdida del poder adquisitivo de los sectores más vulnerables, que dependen de estas ayudas para cubrir sus necesidades más básicas, como la alimentación, la salud y la educación.
Los incrementos también son una medida de contención frente a la creciente desigualdad social, ya que aseguran que aquellos con menos recursos reciban el apoyo necesario para mejorar su calidad de vida. Sin duda, estas políticas contribuyen a una mayor equidad social y promueven la inclusión de los sectores más desfavorecidos en el sistema económico del país.
Conclusión
El aumento en los haberes jubilatorios y asignaciones sociales para diciembre de 2025 representa un esfuerzo importante por parte del gobierno argentino para aliviar la carga económica de los sectores más vulnerables. A través de ajustes que consideran tanto el contexto inflacionario como las necesidades sociales, estas medidas buscan mejorar la calidad de vida de miles de familias y jubilados en todo el país. A medida que se implementen estos cambios, será fundamental monitorear su impacto en la economía familiar y en la reducción de las desigualdades sociales. Sin duda, estos ajustes son un paso en la dirección correcta para un sistema más inclusivo y justo.
